• Jue. Nov 21st, 2024

Radio Mapuche Aukinko

Una Ventana a la Cultura Mapuche

Casimiro Biguá, El Tehuelche

Jul 16, 2023

Vivió cuando Chile y Argentina aún no habían definido sus límites y se disputaban la soberanía en la Patagonia, tomó de esas naciones cuanta ventaja se le ofrecía, fue leal a la tierra misma y a su propia gente.

PUEBLOSORIGINARIOS.COM || Nació en 1819 en los alrededores de Carmen de Patagones. Su padre murió en combate con araucanos; su madre, llamada Joujuna o Junijuni, de origen tehuelche, lo vendió por un barril de agua ardiente a Francisco Fourmantin apodado Bibois, quien llegaría a ser comandante del “Fuerte del Carmen”. Casimiro fue conocido como “Biguá“, una deformación de la pronunciación francesa del mote de su padrino. Aprendió la lengua española y a los 13 años huyó al desierto iniciando una trayectoria que lo convertiría en líder de los tehueches.

Hacia 1841, tras la muerte de María la Grande, asumirá el cacicazgo tehuelche. Su territorio abarcaba desde el Estrecho de Magallanes hasta el río Negro; siendo su centro de residencia, la toldería de la bahía de San Gregorio, ubicada en la orilla septentrional de dicho estrecho.

Las virtudes de Casimiro lo llevaron a ser el líder de todos los tehuelches y ser nombrado capitán por Chile y teniente coronel por Argentina. Entre ellas podemos destacar:

   • Su carisma de líder. Podía entablar relaciones con jefes principales que lo reconocen como tal. Musters1 cuenta: “… cuando no estaba ebrio este hombre era vivo e inteligente, astuto y político. Sus extensas vinculaciones matrimoniales con todos los jefes, inclusive Rouque y Callfulcurá, le daban mucha influencia. Era también obrero diestro en varias artes indígenas (…). Era muy corpulento, de seis pies cabales de estatura; con sus botas de potro y su expresión fisionómica no era desagradable, aunque tenía una que otra cicatriz que no realzaba su belleza”.

   • Su capacidad de lenguaraz. Hablaba español, algo de inglés y los dialectos de las diferentes tolderías tehuelches como las manzaneras. No necesitaba intermediarios en su relación cono los gobiernos y con los distintos líderes étnicos.

   • Su solidaridad. Casimiro se caracterizaba por redistribuir alimentos en tiempos de crisis a las colonias, es decir, cuando por la negligencia de sus gobiernos no eran provistos de los insumos necesarios. Además auxiliaba a las embarcaciones que naufragaban asistiendo a las tripulaciones de alimentos y guiándolos a las colonias.

A partir de la fundación del Fuerte Bulnes con la toma de posesión del estrecho de Magallanes por parte de Chile, en 1843, Biguá se relacionaría con el gobierno chileno, comerciando diversos productos. El 20 de marzo de 1844 firmó un acuerdo con Pedro Silva, gobernador del territorio de Magallanes, que llamaron “Tratado de Amistad y Comercio”. Se obligaba a una mutua protección y se autorizaba a los indios a vender sus cueros en las colonias, que a su vez daría tierra si alguno quería radicarse. El artículo ocho decía que “el cacique Centurión y toda su gente en el mero hecho de haber celebrado estos tratados se ven en la precisa obligación de reconocer el pabellón chileno“. Centurión firmó solo con sus iniciales y Casimiro con una cruz. Santos Centurión, era un blanco uruguayo nacido en Montevideo, que se había adaptado a la vida de los nativos y tras casarse con una mujer tehuelche alcanzó la categoría de cacique y a entenderse con los chilenos con quienes inició un fluido comercio.

El Tratado tuvo repercusión, Biguá llegó a Santiago de Chile, donde fue recibido por el presidente Manuel Bulnes con quien suscribió también un pacto de fidelidad, por lo que recibió el grado y paga de capitán del ejército chileno, además de raciones para sus huestes.

Desde la instalación del marino argentino Luis Piedrabuena2, capitán mercante, cazador de lobos, comerciante industrial, en la isla Pavón en 1859, (ubicada en el río Santa Cruz y a unos 40 km de su desembocadura en el mar), los tehuelches de Biguá comenzarían a comerciar con su factoría. Piedrabuena además de desarrollar actividades lucrativas, colaboraba con el estado argentino para afianzar su presencia en la Patagonia, región en esos momentos disputada por Chile y Argentina.

En 1863, Piedrabuena llegó a la Bahía de San Gregorio donde conoció y forjó amistad con Casimiro. En 1864, impulsado por Piedrabuena, el cacique realiza su primer viaje a Buenos Aires junto a su hijo Sam Slick3. Se entrevistó con el presidente Bartolomé Mitre, quien le asignaría el rango de capitán del ejército y lo nombraría cacique principal de San Gregorio.

En febrero de 1865 Casimiro hizo formar a 400 hombres en la isla Pavón, vestía uniforme militar, mientras sus huestes gritaban: “¡Viva el Gobierno Argentino!”. La escultura en la isla recuerda el episodio.

El 5 de julio de 1865 Biguá reconoció la soberanía argentina hasta el estrecho de Magallanes, incluso sobre Punta Arenas y la bahía San Gregorio, luego retornaría a dicho poblado chileno portando símbolos argentinos. A cambio, se le prometieron raciones dos veces al año. Al año siguiente, Casimiro sería ascendido en Buenos Aires, por mandato de Mitre, a teniente coronel del Ejército Argentino.

En viajes posteriores a Buenos Aires, Casimiro negoció la instalación de una colonia en la bahía de San Gregorio. En octubre de 1868 Piedrabuena se reunió con Domingo F. Sarmiento, nuevo presidente argentino, solicitándole el cumplimiento de embarcar la tropa prometida hacia la bahía de San Gregorio, recibiría una respuesta negativa debido a la precaria situación económica que atravesaba el país.

n 1869, en el valle de Genoa -cerca de la actual localidad de José de San Martín (Chubut)- Casimiro y cinco caciques patagónicos -entre ellos Orkeke y Sinchel -se reunieron para debatir acerca de la conveniencia de ponerse al servicio de la Argentina o de Chile. Luego de varias jornadas, el 3 de noviembre se izó la Bandera Argentina y le juran fidelidad, comprometiéndose a defender los territorios nacionales.

La caravana de Musters y Casimiro

Entre 1869 y 1870 Casimiro realiza un viaje de 2.750 km a través de la Patagonia, desde el Estrecho de Magallanes a Carmen de Patagones. Por pedido de Piedrabuena acepta que lo acompañe George Ch. Musters, quien dejaría un relato de lo sucedido.

Fueron catorce meses donde ocurrieron malones y parlamentos, enfrentamientos y alianzas, agregación y dispersión de fuerzas que se dio en el marco de los procesos formativos de los estados nacionales chileno y argentino.

Los parlamentos indígenas tendrían incidencia en el futuro. Primero con caciques tehuelches al sur de la actual provincia de Chubut, luego en la región cordillerana de Chubut y Río Negro, para concluir en el “País de las Manzanas”:

El 8 de marzo de 1870 en las tolderías de Foyel se celebró un gran parlamento con Casimiro Biguá, Musters cuenta: ” … Casimiro quedaba reconocido como cacique del sur, con jurisdicción de todos los indios al sur del río Limay; que garantizarían la seguridad de Patagones y tendría en jaque a los indios Pampas de Las Salinas, al mando del cacique Callfucurá, en el caso improbable que este tratara de atravesar el río Limay para hacer correrías en las colonias; y, en segundo lugar, que todos juntos iríamos hasta Las Manzanas a visitar a Cheoeque [Sayhueque] para proponerle que garantizara con sus fuerzas la seguridad de la orilla norte del río, lo que refrenaría eficazmente a Callfucurá y aseguraría Patagones”.

En abril se producirían los encuentros con Sayhueque, se resolvió enviar un mensaje a Calfucurá pidiéndole que limitara sus hostilidades a Bahía Blanca; Sayhueque protegería la orilla norte del río Negro, mientras Casimiro garantizaría el sur.

El prestigio de Casimiro había llegado a su auge. Fallecería en 1874, aparentemente como consecuencia de su alcoholismo, todavía la Patagonia era libre, sin fronteras. Lo sucedería Papón.

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *