“No quiero dejar ningún espacio de duda, nosotros respetamos íntegramente la soberanía territorial argentina. Eso no es un asunto que esté en discusión de parte nuestra”.
Buscó ser enfático en su declaración. Y es que, apenas unos días antes de viajar a Argentina en la primera gira internacional de su mandato, al Presidente Gabriel Boric se le abrió un impensado frente justo con figuras políticas de ese país, a raíz del uso por parte de varias figuras de su administración -en especial la ministra del Interior, Izkia Siches- del concepto Wallmapu para referirse al sector del sur del país que abarca la provincia de Arauco y la región de La Araucanía, y que anteriormente se había mencionado por parte de las autoridades como Macrozona Sur.
Esto generó preocupación en círculos argentinos dado que la extensión territorial de lo que en el mundo mapuche se denomina Wallmapu abarca no sólo territorio chileno, sino que también una franja relevante del vecino país, incorporando incluso zonas de la provincia de Buenos Aires.
Considerando ese punto, el Presidente fue claro en señalar en entrevista con el diario trasandino Clarín que en ningún caso el uso del concepto involucra la extensión completa del territorio en la visión mapuche, sino que era un gesto hacia el pueblo indígena chileno acotado a nuestro país.
“Mi actitud y mi invitación es que en América Latina tenemos que repensar la relación que hay entre los Estados Nacionales con los pueblos originarios, con los indígenas. Y eso es lo que nosotros estamos trabajando en Chile. No soy quién para decir a ningún presidente cómo tiene que hacer las cosas en su territorio. Es lo que nosotros vamos a seguir en Chile”, afirmó el mandatario.
“Sabemos que va a ser difícil, las confianzas entre el Estado chileno y el pueblo mapuche. Es justamente la discusión sobre tierras y autodeterminación, que no es lo mismo, y en esto quiero ser muy claro, que ni independencia ni secesión”, agregó Boric.
Con ello, buscó cerrar la controversia, que llevó durante esta semana a Siches a pedir “todas las excusas” por el uso del término si se había generado un malestar internacional, y a la canciller Antonia Urrejola a recalcar la postura oficial de que sólo se buscaba referirse a territorio de Chile.
Esto, sin embargo, le generó un frente interno en su coalición. Por ejemplo, la diputada PC Karol Cariola catalogó de “absolutamente innecesario” el pedido de disculpas de Siches, y el término ha seguido siendo usado durante este fin de semana por autoridades como la delegada presidencial en el Biobío, Daniela Dresdner (RD), y el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue (PC).
Otro miembro de la delegación, el presidente del Senado, Álvaro Elizalde (PS), también se refirió al tema antes de abordar el avión que llevó a la comitiva chilena rumbo a Buenos Aires. ”Se genera una polémica un tanto artificial, porque la propia canciller señaló que la ministra del Interior utilizó este concepto por deferencia con los grupos mapuche y sus comunidades, pero en absoluto existe una reivindicación territorial de Chile respecto al territorio argentino”, planteó
“La propia ministra (Siches) hizo la precisión del caso y la canciller, así que no creo que tenga mayor sentido seguir con este debate”, sentenció el parlamentario socialista